Floda, la hechicera de Akea
Llamada también la hechicera de Akea. En los años de esplendor de Akea, Floda tuvo la habilidad de dominar los elementos. Su increible poder estaba atado a la energía que provenía de los cristales Aisil.
Su papel en la primer batalla contra los Uroz fue crucial para lograr la victoria.
Tiempo después, cuando Ekel cae, tras la emboscada de los Uroz; Floda se entristece profundaménte, dicen que la pérdida de su ser amado la llevó a encerrarse y perder todo su poder. Tanta fue la amargura que su cuerpo se consumió y adoptó una forma monstruosa, pero aterradora para los uroz que merodeaban.
Según las costumbres, los Akeos podían tener solo un hechicero, y al llegar el momento de su muerte, el aprendíz de dicho hechicero ocuparía su lugar. Cuando Floda abandona el mundo corporeo, dando su energía vital para salvar a Virop, Noreina, quién había sido su aprendíz por muchos años, ocupa su lugar.